Una pequeña empresa es como una pequeña embarcación, está formada por un reducido numero de marineros inexpertos y un patrón.
Existen diversos tipos de patrón:
- Patrón de Yate.
- Patrón de embarcación de recreo.
- Patrón de navegación básica.
Todas ellas comparten algunas características básicas: su nave no puede superar un tamaño específico y no pueden navegar por donde ellos quieren.
En la mayoría de estos navíos, sus tripulantes a pesar de ser gente de confianza, son inexpertos, familiares o simplemente aventureros, pero muy leales, pues al ser un grupo reducido, todas las responsabilidades pueden caer en el patrón, con un golpe de vista pude saber dónde está cada uno de ellos y puede dirigirlos con tan solo un gesto de dedo o una voz.
El patrón es la cabeza visible y muy efectiva.
En toda empresa fructífera, como en todo buen navío, llega el punto en el cuál si esta quiere prosperár, tiene que hacer inversiones:
- Un navío mas grande.
- Nuevos materiales, herramientas.
- Nuevos miembros para completar la tripulación.
Si duda el paso mas difícil del partón de barco es convertirse en capitán.
Debe cumplir con una serie de conocimientos que le otorgan especial liderazgo, experiencia y sobre todo responsabilidades muy importante.
Ahora el barco puede ya salir a mar abierto y las decisiones que toma el capitán, deben ser acatada por sus tripulantes y toda decisión que comprometan la seguridad del barco o la de sus tripulantes, podran pasar factura al capitán, llegando incluso a su in-habilitación por parte de las autoridades o bien por parte de la tripulación.
Dado que la tripulación es ahora mas grande, las labores de comunicación por parte del capitán, son mucho mas dificultosas, existen multitud de opiniones en torno a las decisiones del capitán y por supuesto la probabilidad de motines a bordo aumentan de manera considerable.
Es por ello que un elemento fundamental cuando las tripulaciones crecen considerablemente, es la figura de la cadena de mando, que cobra una especial relevancia:
Todo miembro de la tripulación tiene al menos un responsable que le ordena y que asume las responsabilidades de las acciones ordenadas «no asume las acciones tomadas por el marinero sin serle ordenadas», salvo el capitán que asume toda la responsabilidad en último caso.
La comunicación entre los distintos niveles de la cadena de mando, hace que el capitán pueda controlar a todos y cada uno de los marineros del barco, es tarea del capitán escoger bien a estos miembros, pudiendo incluso vetar las decisiones de estos.
Esto permite diversificar las responsabilidades y funciones que requiere el barco, cuando el capitán tiene asuntos mas importantes que resolver.
La vida en el mar es parecida al mundo de los negocios, debemos aprender cuanto podamos de ellos, pues es posible que ellos lleven mas en el mar que nosotros en los negocios.